Luis Abinader ha cometido el grave error de exhibir
el más bajo de los instintos que pueda tener una persona común, que
jamás un político que aspira a ser Presidente de la República:
proclividad a la intolerancia, a la agresividad, a la descalificación,
al insulto soez y desproporcionado...
... Ya podría cualquiera imaginarse de lo que sería capaz una persona de su naturaleza detentando el poder que le sugiere la Presidencia de la República, convertido en “primero entre sus iguales” en un país como este donde el Presidente es un semidiós que todo lo puede.
... Ya podría cualquiera imaginarse de lo que sería capaz una persona de su naturaleza detentando el poder que le sugiere la Presidencia de la República, convertido en “primero entre sus iguales” en un país como este donde el Presidente es un semidiós que todo lo puede.