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miércoles, abril 22, 2020

La Mafia imperante en Aduana con las mascarillas y guantes ante pandemia del COVID-19

No se puede gobernar un país que en una crisis como la del coronavirus, los que manejan los asuntos en aduanas ponen mil trabas y cortapisas para sacar los guantes y las mascarillas que la usa el pueblo dominicano para combatir la pandemia, las autoridades y la mafia imperante en aduana tienes miles de requisitos hasta un permiso del Ministerio de Salud Publica y mil escollos con el único objetivo de la manipulación y controlar  el negocio para favorecer un grupo de determinada facción del PLD, y así pescar en mar revuelto y hacer pingue negocio con el sufrimiento, el dolor y la crueldad con que se manejan estos negocios dentro de una crisis sin precedente en la historia de la humanidad. 

En un país desarrollado y civilizado, dan facilidades a todos los ciudadanos, específicamente los comerciantes, para suplir en  caso tan necesario en esta pandemia,  como las mascarillas y los guantes, que se utilizan para combatir el coronavirus, no cualquier ciudadano puede dar $70 pesos hasta $ 700 pesos por una mascarilla, lo que representa para el pueblo un sacrificio enorme, y aun así las autoridades no se conduelen de un pueblo que estoicamente y sin recursos para sobrevivir esta soportando con valor espartano los embastes de esta pandemia y crisis económica y alimentaria, donde las grandes mayorías del pueblo dominicano viven del día a día, lo que resulta mas difícil la supervivencia y mejorar las condiciones materiales de existencia. 

Se debe tomar en consideración la entrada masiva de medicamentos, materiales gastables, para en vez de especular la competencia se haga mas efectiva y puedan bajar esos productos de seguridad ciudadana,  inalcanzable para la familia dominicana y para una familia de clase media y los que están sumergido en la pobreza extrema, al no estar trabajando el día a día, se le hace imposible, mantener una familia con el costos de los medicamentos y materiales que se utilizan para combatir este virus, que ha resultado un dolor de cabeza para el pueblo dominicano, por la falta de regulación de los precios de esos artículos inalcanzable para los pobres de esta sociedad capitalista y en deterioro masivo. 
Por William Reyna Rivas ;-
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