En contexto actual de la política pone al PRM contra la pared.
Al final de su período presidencial Hipólito Mejía hizo modificar la Constitución para buscar la reelección. Para esos fines compró legisladores del PLD que fueron expulsados de esa entidad. El reeleccionista perdió y aunque posteriormente alegó arrepentimiento, en la práctica apoya tales prácticas porque algunos diputados del PRM que siguen sus ideas votan contra su partido.
En este período se comprobará con los hechos, si el PRM está con la Constitución o la reelección.
En el PRM existe la misma lucha que en el PLD. Ambas organizaciones tienen dos dirigentes en pugna, pero la diferencia es que uno de la oposición coincide con el gobierno convertido en contrapeso de Abinader para frenar su crecimiento. Abinader está soltando amarras y tal parece que por fin iniciará acciones continuas y sostenidas para afirmar su posicionamiento. Recientemente logró el apoyo político de la veterana Milagros Ortiz Bosch, un icono político nacional, con lo que logró fuerza en varios sectores. La dirigente Ortiz Bosch representa la honestidad de la mujer política; fue congresista, ministro, la primera mujer Vicepresidente de la República y es decana de la política. No respaldó la aventura reeleccionista de Hipólito y esto también influyen para creer que Abinader se mantendrá firme contra la reforma constitucional.
En el PRM es difícil para Hipólito encontrar un dirigente que pueda neutralizar el impacto de esta adquisición. Bajo cuerda se menciona a Faride Raful y hasta se la menciona como candidata a la vice por la oposición.
El escenario otra vez lo incendía la reelección. No obstante, el tiempo político tiene vientos contra la reforma constitucional.
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