Mario José Redondo Llenas |
La sola idea de libertar a Mario José Redondo
Llenas le pone a cualquiera los pelos de punta. Porque ese individuo es
un sociópata peligroso que hace 17 años secuestró a su primito de once
años, lo asesinó viciosamente de 34 puñaladas y lanzó su cadáver en un
monte periférico de la ciudad.
Después, salió con el resto de la
familia a “buscar” al niño cuando fue declarado “desaparecido”, lloró a
lágrimas vivas en la funeraria abrazado a los padres de su víctima y en
el cementerio estaba inconsolable...
Está condenado a 30 años de
prisión, y desde que cumplió la mitad de la pena, hace dos años, tiene
la opción de solicitar la libertad condicional, cosa que acaba de hacer
para inquietud de mucha gente.
Ese hombre suelto es un peligro...
En todas las instancias del juicio demostró una pasividad enfermiza,
nunca ha dado signos de arrepentimiento y actúa con la inteligencia
propia de las personas con su síndrome: trastorno de la personalidad
antisocial.
Su comportamiento en todos estos años en la prisión ha
tenido exactamente el patrón de conducta de quienes padecen ese
trastorno: hacendoso, generoso, gentil, colaborador...
Es su forma
inteligente para ganarse la confianza de su entorno, fingir una
personalidad que aborrece para abrirse una brecha hacia la libertad. Al
lograrla, los enfermos como él terminan reincidiendo en el crimen
horrendo que le llevó a la cárcel.
Su actitud en presidio
Redondo Llenas confirma con su actitud en presidio su condición de sociópata peligroso.
Redondo Llenas confirma con su actitud en presidio su condición de sociópata peligroso.
Es
el primer voluntario en toda causa noble, es profesor de sus compañeros
reclusos en diversas asignaturas, incluyendo idiomas; colabora como
auxiliar en los actos religiosos que celebra el penal, su conducta es
intachable y su comportamiento ejemplar.
En los 17 años que lleva
en Najayo, Redondo Llenas no tiene una sola tachadura en su hoja de vida
carcelaria... Todo lo contrario, muy pocos reclusos han pasado por ese
penal con tan correcto comportamiento.
Un segundo participante en
el crimen, Juan Manuel Moliné Rodríguez, fue condenado a 20 años de
prisión. Era amigo íntimo de Redondo Llenas y entre ambos cometieron el
crimen en una orgía de horror y sangre.
Moliné cumplirá su sentencia en dos años y unos meses. Siempre se le ha negado la libertad condicional.
César Medina |
Los hechos...
El 3 de mayo de 1996, hace 17 años y seis meses, se denunció la desaparición de un niño de once años, José Rafael Llenas Aybar, hijo de un matrimonio de clase media alta residente en el sector Piantini de la capital.
El 3 de mayo de 1996, hace 17 años y seis meses, se denunció la desaparición de un niño de once años, José Rafael Llenas Aybar, hijo de un matrimonio de clase media alta residente en el sector Piantini de la capital.
Por casi 24 horas se buscó incesantemente al niño y al
final del día 4 fue hallado su cadáver tirado en una cañada próximo a la
autopista Duarte, maniatado y con múltiples puñaladas.
La
investigación determinó que el niño había sido secuestrado por su primo
Redondo Llenas y su cómplice Moliné y asesinado después de abusarlo
sexualmente.
En la Justicia se conocieron posteriormente los
pormenores del sadismo que envolvió el crimen. Los detalles
escandalizaron a la sociedad dominicana.
Llenas Aybar tuviera hoy
28 años. Su asesinato provocó la separación y divorcio de sus padres,
una pareja bien avenida que quedó estremecida por el hecho de sangre que
involucró a un sobrino del padre del niño asesinado.
Un sondeo
realizado ayer por Listín Diario sobre la solicitud de libertad
condicional de Redondo Llenas, arrojó resultados muy contundentes:
¡Nueve de cada diez personas no quieren a ese demonio en la calle!
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