Por.Emilio Herasme Peña
Quienes conocen el desenvolvimiento político y
electoral de Venezuela en el transcurso de los últimos 50 años, están
convencidos de que el pensamiento chavista prevalecerá en ese país
sudamericano por largos años, aun después de la muerte reciente de su
líder Hugo Chávez Frías.
Eso es mucho más cierto para quienes, además, han
seguido de cerca lo que ha acontecido en Argentina con el pensamiento o
la corriente política identificada con Juan Domingo Perón.
La similitud entre el chavismo y el peronismo es
casi absoluta, y la diferencia entre ambos radica en que éste último
tenía y aún tiene su principal base de sustentación en la clase obrera
argentina, y el primero entre los pobres venezolanos.
Sus orígenes militares
Pero ambos tienen en común sus orígenes militares,
aunque el peronismo se nutrió además de la gran popularidad de Eva
Perón, fruto de su accionar entre los pobres argentinos; mientras el
chavismo se aprovechó del gran vacío dejado por los partidos
tradicionales y mayoritarios venezolanos.
Pero tales diferencias importan poco, y lo que sí
importa es que tras la muerte del líder peronista, esa corriente
política ha sido la que más ha prevalecido en Argentina, y prueba de
ello es que tres de los cuatro últimos presidentes electos de ese país
han salido de las filas peronistas como Carlos Mennen, Néstor Kirchner y
la actual mandataria Cristina Fernández.
De su parte, el chavismo con su líder fundador ha
ganado las últimas cuatro elecciones presidenciales celebradas en
Venezuela, entre ellas las presidenciales de octubre pasado; triunfo que
fue revalidado en diciembre último en ocasión de los comicios para
gobernadores, donde obtuvo una victoria mucho más aplastante.
La fuerza actual del chavismo
Se recuerda que Chávez ganó por primera vez la
presidencia de Venezuela basado en su discurso contra la corrupción
galopante que arropó a los gobiernos previos de los partidos Acción
Democrática y COPEI, así como el encabezado por Rafael Caldera y su
movimiento Convergencia, cuyas “indelicadezas” salpicaron al Movimiento
al Socialismo, MAS, durante el gobierno calderista de 1995 a 1999.
Hasta ese momento el MAS era la tercera fuerza electoral venezolana.
Si el chavismo ha ganado las cuatro últimas
elecciones presidenciales, incluyendo la mas recientes hace pocos meses
atrás, es porque dentro del electorado de su país todavía prevalece el
rechazo a los políticos corruptos del pasado, cuyos reductos se han
agrupado en la actual opositora Mesa de la Unidad.
Ello es así, porque independientemente de sus
bien acogidos programas educativos, de salud, de construcción de
viviendas para los pobres y el reparto de tierras a los campesinos,
sigue vigente la gran repulsa popular a esa corrupción del pasado no
lejano.
El importante apoyo militar
El otro apoyo importante del chavismo, se lo dan
unas Fuerzas Armadas formadas en el pensamiento nacionalista del
Libertador Simón Bolívar, el cual se manifestó activamente cuando los
militares revirtieron el golpe de Estado de 2003, siendo la Fuerza Aérea
la que desempeño el papel principal.
Ese apoyo militar ha permanecido y permanece
intacto y quizás más fuerte que antes, debido a que oficiales de alto
rango han sido los encargados del manejo de presupuestos millonarios en
la implementación de los programas gubernamentales de obras y servicios a
favor de los pobres; y el alpiste o ración del boa que ellos reciben,
influye muchísimo en ese respaldo castrense al chavismo.
Por más críticas vertidas en Venezuela y en el
exterior contra el chavismo, éste ha conservado su gran arrastre
popular, más la adición de ese respaldo militar donde a la fecha no ha
emergido ninguna clase de fisura.
La herencia de Chávez
Se sabe que el principal heredero del fenecido
presidente Chávez es Nicolás Maduro, juramentado ya como presidente del
país, y no cabe la mejor duda de que éste logró obtener buenas notas
desde que su líder viajó a Cuba meses atrás para someterse a su cuarta
operación de cáncer, la cual no superó.
Manteniendo el mismo discurso chavista, la
mancuerna que Maduro ha hecho con el presidente de la Asamblea Nacional,
Diosdado Cabello, le ha permitido desarrollar un liderazgo emergente
que pocos discuten, lo que, hasta prueba en contario, le ha dado los
beneficios esperados.
Si Chávez escogió a Maduro como su heredero, a
pesar de su corto tiempo en las más altas instancias del chavismo, no
obstante sus años como canciller del país, es porque sin duda el líder
descubrió en él las mejores cualidades para convertirse en su sucesor.
Rezo subregional
Se puede asegurar que los actuales gobernantes y
pueblos del Caribe y Centroamérica empezarán a rezar desde ahora para
que los chavistas se mantengan en el poder, a los fines de que
Petrocaribe siga vigente como hasta ahora.
Esto se explica porque la oposición venezolana ha
criticado a Petrocaribe, y si ella gana las próximas elecciones, es casi
seguro que ese mecanismo de financiamiento de los precios del petróleo
venezolano, sería eliminado o modificado sustancialmente en perjuicio de
sus beneficiarios.
Sin duda que el antichavismo imperante en los
círculos de poder de los Estados Unidos y entre los antichavistas de
América Latina, estarán deseando, y harían todo lo que esté a su
alcance, para que los chavistas pierdan las próximas elecciones; y si
esto ocurriera en el Caribe y Centroamérica se empezará a “llorar
lágrimas de sangre”.
Nada casual
La presencia en Venezuela de tantos presidentes y
jefes de gobiernos de América Latina y de la región del Caribe en los
funerales de Chávez, no es casual, sino que constituye una demostración
palpable del liderazgo continental del recién fallecido gobernante
venezolano.
Es que, el carisma de Chávez y su accionar único
en este continente, no tiene precedentes en virtud de que él llegó al
poder y se mantuvo gobernando su país, mediante los procedimientos
democráticos admitidos y defendidos por occidente.
Una parte de esos gobernantes asistentes a los
funerales de Chávez lo hicieron por estar identificados con su accionar
político y sus propósitos, y otros agradecidos por la ayuda que él ha
prestado a sus respectivos países, y a ellos mismos, a través de
Petrocaribe.
Esa es la verdad absoluta, ya que este continente ha dado pocos presidentes como Hugo Chávez Frías. ¡Así de sencillo!
Superó a Allende
Sostener que Chávez superó a Salvador Allende,
parecería una herejía para quienes tienen a éste como paradigma de
gobernante progresista y digno, pero esa es la pura verdad cuando se
hace una comparación entre ambos.
Chávez superó a Allende porque su carisma y
liderazgo permitió revertir el golpe de Estado en su contra; porque le
sobrevivió a la hostilidad de los gobernantes de los Estados nidos;
porque motorizó una nueva situación política en América Latina, y porque
ganó cuatro elecciones presidenciales consecutivas por la vía
democrática, cosa que no logró el histórico gobernante chileno, que ni
siquiera pudo concluir su único mandato.
Además, porque debido a que Venezuela produce
petróleo en grandes cantidades, eso le permitió a Chávez ir en ayuda de
los países del continente no productores y pobres; cosa que Allende no
pudo hacer porque Chile lo que produce es cobre, un mineral menos
estratégico y menos útil que el petróleo para las economías de
Latinoamérica; y, además, porque ha dejado una herencia política
inmediata, que en Chile emergió mucho tiempo después de la larga,
sangrienta y criminal dictadura de Augusto Pinochet.
¿Quién ganará?
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Emilio Herasme Peña |
La pregunta que todos se hacen, aquí, en
Venezuela, en toda América Latina, en Estados Unidos y en el mundo, es
¿quién ganará las próximas elecciones fijadas ya para el 14 de abril
próximo?.
A menos que ocurra lo imprevisto, dichos comicios
deben ganarlos los chavistas y su candidato presidencial Nicolás
Maduro, no sólo porque éstos triunfaron por amplio margen en las dos
elecciones de finales del pasado año, sino porque además la muerte
reciente de su carismático líder, debe ser un factor sentimental a favor
de ellos.
Nadie puede poner en duda que el esfuerzo enorme
que Chávez hizo en los años más reciente en aras de sus ideales a favor
de las reivindicaciones de los más pobres de Venezuela, debe favorecer a
los chavistas; y a más de eso las muchas oraciones que se elevarán al
cielo desde los países favorecidos por Petrocaribe, así como de aquellos
otros de Latinoamérica donde los aliados de Chávez ocupan el poder.
De todos modos, habrá que esperar lo que decidan
las urnas, ya que de ese resultado dependerá en gran medida el futuro de
ese amplio movimiento nacionalista que vive hoy Latinoamérica tras el
ascenso de Chávez al poder en 1999; extendido a Brasil, Argentina,
Ecuador, Bolivia, Perú. Uruguay, Nicaragua e incluso a El Salvador.
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