San Juan se ha manifestado en todos los sentidos contra la explotación minera en sus lomas. Por su parte la Gold Quest y el gobierno insisten en sus planes, en el caso de este último, con una agenda contradictoria y confusa, pues mientras declara el presente cuatrienio como el “del agua”, toma medidas contra ese recurso que en lo concerniente a San Juan, utiliza las aguas del río San Juan para consumo humano, agricultura y producción eléctrica.
Peor aún, olvida el gobierno y su ministro de energía y minas que la provincia San Juan fue declarada “ecoturística” por medio de la Ley 163-05 y que el impacto que esa absurda explotación causará al parque nacional José del Carmen Ramírez, zona que de directa o indirectamente sería severamente lacerada.
Con el auspicio de las autoridades, incluyendo asesores de las mismas, la empresa privada que se beneficiaría de esa explotación ha pretendido confundir la opinión pública con cosas tan inverosímiles como que no se dañará la zona boscosa, sin embargo, el simple hecho de tener que construir las carreteras de acceso, el campamento de operación, etc., implica tener que desmontar la capa vegetal de grandes extensiones de terreno.
Promover que no usará las aguas del río San Juan para le explotación que se haría en sus inmediaciones, resulta ser un gran engaño, pues sólo en mentes enajenadas por la pecunia cabe que con el agua lluvia se realizarían esas operaciones mineras. San Juan vencerá una vez más.
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