Las acciones de la empresa acusada de adulteración se desploman en un
20% y el impacto en el mercado de valores ahonda la crisis brasileña.
Las acciones de la empresa JBS, recientemente acusada de vender carne vencida y adulterada, se hundían casi un 20% en la jornada bursátil de este lunes.
La incertidumbre sobre la resolución de los asuntos judiciales de los
altos cargos de la empresa cárnica se ha sumado a la presión ejercida
por la investigación policial en curso.
El resultado ha sido demoledor:
a comienzos del día, JBS registraba pérdidas cercanas a los 3.000 millones de reales (unos 822 millones de euros) en su valor de mercado.
JBS es uno de los mayores exportadores de carne a nivel mundial, por lo que la implicación de algunos de sus directivos en un escándalo de corrupción ha supuesto una verdadera crisis institucional y política en Brasil.
Uno de esos directivos es Joesley Batista, que llegó a afirmar que
pagaba sobornos desde 2010 al actual presidente de Brasil, Michel Temer,
y le grabó una conversación en la que habla con el mandatario sobre la
posibilidad de obtener "favores" para su empresa en ministerios o sobre
unos sobornos a un exdiputado condenado por corrupción y cercano al
propio Temer, para comprar su silencio. SAraíz de estas revelaciones, la
Corte Suprema abrió una investigación
contra el jefe de Estado a petición de la Fiscalía, para aclarar la
supuesta participación de Temer en delitos de corrupción, obstrucción a
la Justicia y organización criminal. Temer, por su parte niega la autenticidad de la conversación grabada y niega también cualquier posibilidad de dimisión.
¿Juego sucio en la bolsa?
Según el portal argentino 'Ambito.com', "la
Comisión de Valores Mobiliarios (CVM), el órgano fiscalizador del
mercado, ha abierto hasta la fecha cinco investigaciones contra JBS, una
de ellas relacionada con este asunto y con la supuesta compra de
dólares antes del terremoto político". En concreto, algunos empresarios
de JBS habrían adquirido una considerable cantidad de dólares durante la
misma víspera del escándalo, previendo que el real brasileño se
desplomaría con fuerza a causa de la crisis provocada, cosa que acabó
sucediendo. En un comunicado enviado
al mercado la noche del viernes, JBS justificó que 'los movimientos
realizados en los últimos días están alineados a su política de gestión
de riesgos y protección financiera".
No hay comentarios:
Publicar un comentario