Todos los consultados afirman que el Senado no
cambiará su protocolo para la selección de las autoridades de la Junta
Central Electoral. Significaría que quien no haya inscrito su nombre en
el rol de aspirante tiene el lunes como plazo para hacerlo. Entre los
posibles y probables está el actual presidente del organismo, Roberto
Rosario Márquez. En la oposición hay hervidero. Aunque la dirección del
PRM afirma que construir la JCE con personas militantes no será
respaldado, muchos de sus dirigentes no comparten la posición. Igual
tesitura se alegaba con relación a la Cámara de Cuentas, y sin embargo,
Rafael Montilla y José (El Pastor) Marte Piantini se inscribieron.
Estos dos dirigentes, que aspiran a ser integrantes de la Cámara de Cuentas, seguramente no actuaron por sus propias cuentas aunque podrían estar en cámara de observación por los demás integrantes si lo hicieron por propia decisión. Sería un gesto a imitar o argumento para presionar.
En la reunión de la Dirección Política del PRM el lunes hubo balbuceos sobre el tema. Aunque sin conclusiones, se abrió la brecha para que Montilla diera un salto al centro y lanzara su bola, mientras que Marte Piantini repicó en el tabloncillo por ser delegado del partido ante la JCE y reclamar sus numeritos en el marcador del equipo.
Los aspirantes modernos están impacientes de que se levante la veda. Ya la guagua arranca el día 19 y no quieren que el partido y sus hombres se queden en la parada.
En reciente juntadera de modernos a Antoliano Peralta Romero sus compañeros le pidieron que insista para ser nominado para la JCE porque tiene méritos para defender los colores del PRM. Otros también avivan a Sigmund Freund y Julio Peña Guzmán. Dos jóvenes abogados de talento.
No sería la primera vez que a la oposición la dejan en el estribo. En el gobierno de Hipólito Mejía se constituyó una JCE confeccionada en el Palacio Nacional. Digo, así es que siempre se hace, pero disimulan usando el Senado. Hay que guardar las apariencias.
En oídos de los especuladores políticos resuenan los nombres Salim Ibarra, del PRD; también del sector civil a Carmen Imbert Brugal, una de las pocas mujeres en la lid; Servio Tulio Castaños Guzmán y Francisco Álvarez Valdez. Hay muchos nombres en liza. A la Cámara de Cuentas aspiran 284. Desestimo que el PRM esté en babia.
Estos dos dirigentes, que aspiran a ser integrantes de la Cámara de Cuentas, seguramente no actuaron por sus propias cuentas aunque podrían estar en cámara de observación por los demás integrantes si lo hicieron por propia decisión. Sería un gesto a imitar o argumento para presionar.
En la reunión de la Dirección Política del PRM el lunes hubo balbuceos sobre el tema. Aunque sin conclusiones, se abrió la brecha para que Montilla diera un salto al centro y lanzara su bola, mientras que Marte Piantini repicó en el tabloncillo por ser delegado del partido ante la JCE y reclamar sus numeritos en el marcador del equipo.
Los aspirantes modernos están impacientes de que se levante la veda. Ya la guagua arranca el día 19 y no quieren que el partido y sus hombres se queden en la parada.
En reciente juntadera de modernos a Antoliano Peralta Romero sus compañeros le pidieron que insista para ser nominado para la JCE porque tiene méritos para defender los colores del PRM. Otros también avivan a Sigmund Freund y Julio Peña Guzmán. Dos jóvenes abogados de talento.
No sería la primera vez que a la oposición la dejan en el estribo. En el gobierno de Hipólito Mejía se constituyó una JCE confeccionada en el Palacio Nacional. Digo, así es que siempre se hace, pero disimulan usando el Senado. Hay que guardar las apariencias.
En oídos de los especuladores políticos resuenan los nombres Salim Ibarra, del PRD; también del sector civil a Carmen Imbert Brugal, una de las pocas mujeres en la lid; Servio Tulio Castaños Guzmán y Francisco Álvarez Valdez. Hay muchos nombres en liza. A la Cámara de Cuentas aspiran 284. Desestimo que el PRM esté en babia.
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