Por: Arq. William Rafael Reyna Rivas.-
Las
condiciones materiales de existencia de los dominicanos va cada día en
deterioro, al bajar el barril del petróleo en los mercados bursátiles
internacionales, nada ha bajado a los dominicanos, el alto costo de la
vida se incrementa considerablemente, la tasa del dólar que recibió este
gobierno fue de treinta y ocho por un dólar, hoy está en el mercado
preferencial del dólar a cuarenta y cinco por uno la compra y para la
venta hasta el cuarenta y siete por uno. Los salarios de los dominicanos
están congelados, el poder adquisitivo del peso va cada día en
detrimento, las riquezas del nuestro suelo como el oro, el ferroníquel,
la bauxita, nunca el pueblo ha visto un centavo por los recursos
mineros, todo es un engaño garrafal para las grandes masas desposeídas.
Si
nos ponemos a analizar cómo viven las grandes masas desposeídas del
país y la comparamos con los millones de haitianos ilegales en nuestro
territorio y comparamos reglón por reglón los haitianos ilegales viven
mejor que los dominicanos que nacieron en esta tierra de Duarte, Sánchez
y Mella.
Comenzando por el reglón de la construcción, no se
cumple con la Ley del 80% dominicanos y un 20% de extranjero ósea que un
99.9% en todas las construcciones del país tanto del estado dominicano
como privada son los nacionales haitianos que ocupan ese reglón.
Si
tomamos la industria del turismo, un 99.9% son haitianos, si vamos a
cualquier Hotel de la costa Norte o Este, podemos ver que los que
laboran en la industria del turismo son haitianos, ósea que los
haitianos son los que dominan esos dos renglones.
Pero si nos vamos a la agricultura, las principales fincas de arroz,
café y cacao la manos de obra que encontramos son de haitianos
sustituyendo a los dominicanos en todos los renglones de la agricultura
nacional.
Pero si nos paramos en un semáforo de cualquier ciudad, vemos como los
haitianos sustituyen a los dominicanos en la venta de frutas y viandas,
tenemos los semáforos llenos también de pedigüeños haitianos.
El
nacional haitiano no paga impuesto de ninguna índole, viven en su
mayoría ilegales, que no se sabes que identidad tiene ese señor que anda
ilegal en el país, no se pueden deportar porque están protegidos por un
decreto presidencial como el 327-13.
El nacional haitiano no paga
energía eléctrica, no paga impuesto, no paga agua, no paga documento de
identidad, la salud es gratuita en los hospitales del país, mientras
que el dominicano tiene que comprar hasta la aguja, el hilo para suturar
cualquier herida, la antitetánica en los hospitales del país, las miles
de parturientas haitianas son atendidas gratis en nuestros hospitales,
mientras las dominicanas tienen que pagar el consumo en los hospitales
las haitianas no tienen que pagar un centavo.
Todo ese dinero
generado por los millones de haitianos que están sustituyendo a los
dominicanos en todos estos renglones se va para Haití sin pagar un solo
centavo de impuesto al estado dominicano, todo en detrimento de nuestra
economía y en perjuicio de los dominicanos que pagamos impuesto al
país.
A los haitianos se les construye miles y miles de
viviendas gratuitas en Monte llano Puerto Plata, en Barahona y en casi
toda la geografía nacional y el único requisito es ser ilegal, mientras
que los dominicanos carecen en su gran mayoría de una vivienda digna
para su hábitat.
A nivel profesional se está dando el caso que ya
en el campo de la medicina los médicos haitianos están sustituyendo a
los dominicanos, gran preocupación siente la clase médica dominicana,
pues ya están sustituyendo los haitianos a los dominicanos.
Y lo
más grave de todos los casos es que ya Nuestra Fuerzas Armadas
Dominicana están siendo sustituidas por militares haitianos que están
siendo enganchados al vapor ahora más en este gobierno…
Mi pregunta es no viven los nacionales haitianos ilegales mejor que los
dominicanos nacido y con raíces historia en la República Dominicana…
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