FUENTE.- Temístocles Montás perdió el
miedo, y se le soltó la lengua, y este fin de semana habló como tienen
que hacerlo los aspirantes a la candidatura del PLD. No pueden seguir
ignorando las dificultades de Leonel Fernández, o defendiéndolo de
acusaciones que no conocen, pero tampoco diciendo que gobernarán como
Danilo Medina. Lo primero es complicidad y lo segundo una mentira. El
estilo es el hombre, y cada político tiene una forma particular de
pensar y una manera muy personal de gobernar. La precampaña había que
ponerla sobre rieles y cada cual en su tren. Montás dejó de divagar
sobre liderazgos y alternancia en el poder, e hizo como Pizarro y Cortés
en su momento: tiró la raya y quemó las naves.
Sus palabras fueron
consideradas una perla, pero en verdad fueron peñones: “El que haya
cometido actos de corrupción, que significa robar el dinero del pueblo,
que lo lleven al banquillo de los acusados, porque eso es lo que se
estará ventilando en las primarias del partido. Es la necesidad de que
se siga adecentandoÖ”. Quien pida más es un gandío, pero que sepan los
demás que no se espera menos de ellos. No se pare sin romper fuente...
IMPOSIBLE.-
No se trata de perseguir a Leonel Fernández o a los suyos, ni de
alegrarse del mal que les desean sus enconados enemigos políticos, sino
poner cada cosa en su lugar. Tal vez los oponentes exageren, y esa es su
suerte, pero tampoco conviene hacer de tontos. Y todavía más, de tontos
útiles. No puede pensarse que Fernández y su grupo podían gobernar
durante ocho años corridos sin romper un plato, sin cometer una
indelicadeza. El problema no puede ser el Procurador General ni la
Fiscal del Distrito Nacional, ni el ministerio público en su conjunto.
Ellos hacen su trabajo, y las obstrucciones, advertencias o amenazas
serán complicaciones que al final se devolverán y harán más difícil la
situación de los afectados. Tienen derecho a la defensa, y hasta a la
inocencia, pero requeridos por las autoridades tiene que hacerlo en los
tribunales. Francisco Domínguez Brito se metió en camisa de once varas y
Yeni Berenice Reynoso se puso pantalones de hombre que ñobviamente--
les quedan grandes. No obstante, ni uno ni la otra pueden cambiarse de
ropa como si fueran cantantes en un concierto...
AHORA.-
Leonel Fernández tiene que hacer como mandaba Jesús en su prédica. Antes
de hacer la ofrenda debe reconciliarse con sus enemigos, y no podrá
hacerlo a menos que entregue a uno de sus reos. No puede salvarlos, por
mucho poder que haya acumulado, al tiempo que se presenta para un nuevo
período. O una cosa o la otra, pero nunca las dos. Incluso, si la
determinación se le hace difícil, y evidentemente amarga, que lance un
chele al aire, y dependiendo de la cara, decidir cuál pato se ahoga. Hay
causas perdidas por adelantado. Por ejemplo, se hará cuesta arriba
negar la propiedad de todos esos bienes que se atribuyen a Félix
Bautista. Igual, si el expediente contra Víctor Díaz Rúa se archiva, y
la gente no cree que sea obra del derecho, sino de las presiones, la
sospecha de que algo malo se esconde provocará condena en ese tribunal
implacable de la opinión pública. Las versiones que acogen los medios
guardan la forma, pero no sucede lo mismo con las que van de boca en
boca. Dejar eso así, como si solo fuera maledicencia, podrá servir a
fines de coyuntura, pero a la larga el descrédito impondrá su sello...
¿QUÉ HARÁN?.-
Ahora que Temístocles Montás se libra de pecados y lanza la primera
piedra ¿qué harán Francisco Javier García, Reinaldo Pared y Radhamés
Segura? ¿Mantenerse como niños de iglesia que van a misa de seis o
reburujar el credo con piedra? De seguro que Montás seguirá en sus trece
y repetirá su nuevo discurso en cada escenario y ocasión, como lo hizo
antes con el liderazgo y la alternancia. En el PLD hay quienes quieren
que los aspirantes a la candidatura sean monjes de recoleto y que no
levanten la voz y mucho menos se agravien. Que sean un solo bostezo. Que
es lo que es hasta ahora la precampaña: un sancocho con muchos víveres y
poca carne. Podrá Montás cambiar ese orden predeterminado. ¿Le llamarán
la atención, y de hacerlo, quién: el presidente del partido, el
secretario general o el Comité Político? Si van a la caza del Procurador
General ¿qué harán con el ministro de Economía? O el PLD se vuelca
hacia adentro o se abre la trampilla y se salen todas las aves del
corral...
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