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Embajador Raúl Yzaguirre |
Es verdaderamente inusual escuchar de la
renuncia de un Embajador de los Estados Unidos de América,
principalmente si es en Latino América. Lo que se estila es, que el
Departamento de Estados de los Estados Unidos traslade rutinariamente a
sus Embajadores, no que estos abandonen el cargo. La más reciente
renuncia de un diplomático americano de esa categoría, había sido, hasta
ahora, la del Embajador Carlos Pascual en México en el año 2011.
Esta se produjo por fricciones con el entonces
Presidente Felipe Calderón, quien se quejó del contenido de unos cables
que se publicaron, a través de Wikileaks, donde el Embajador describía
la ineficiencia y los conflictos internos de las fuerzas de seguridad
mexicanas.
En esa ocasión, el embajador Carlos Pascual dijo
que “tomaba la decisión de volver a Washington basada en su deseo
personal de asegurar la estrecha relación entre nuestros países”
Hoy, alegando problemas de salud, Don Raúl
Yzaguirre, nos sorprende anunciando su renuncia como embajador de los
Estados Unidos en nuestro país.
El lenguaje diplomático es muy difícil de
traducir. Tanto que a veces no solo es complicado sino imposible.
Dejándole a los interpretes solo el recurso de acceder al diccionario de
la especulación.
Es de todos sabido que el departamento de Estado de la poderosa nación del norte, habla a través de sus embajadores.
El señor Izaguirre había comentado, luego del
discurso de rendición de cuentas del Presidente Danilo Medina el pasado
27 de Febrero, en el cual se refirió al contrato con la minera Barrick
Gold, que las declaraciones del Presidente Medina “traerían
consecuencias” Aunque no especificó qué tipo de consecuencias serían
estas.
Afirmó que las decisiones del presidente Danilo
Medina sobre la empresa minera pueden ser "peligrosas" para las
relaciones internacionales.
Cuando los periodistas le preguntaron si eso
podría afectar las relaciones entre ambos países, el Embajador contestó;
“Yo creo que no se llega a ese nivel, pero sí va a haber
consecuencias”.
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Carlos McCoy |
Sin embargo, hace una semana el Embajador
Izaguirre vuelve sobre sus pasos y declara: “Mi opinión ha cambiado un
poco, entiendo que el pueblo dominicano tiene un sentido muy profundo
sobre ese tema, y aprecio mucho la manera en que ha conocido y manejado
el tema de la Barrick Gold”.
Hasta ahora, esta minera multinacional había
mantenido una actitud de prepotencia en las conversaciones con el Estado
dominicano, pero la situación ha dado un giro inesperado y vemos en la
prensa la llegada a nuestro país de siete altos ejecutivos de la Barrick
Gold, pero no desde Canadá, sino desde Denver, Colorado, USA.
¿Quién habló luego del discurso del Presidente
Medina? ¿El señor Raúl Izaguirre o el Embajador de los Estados Unidos
de América?
¿Quién “cambió un poco de opinión”?
Es posible que el común de los mortales nunca tengamos unas respuestas a esas interrogantes, Pero a todas luces algo cambió.
Esperamos que ese giro de la veleta comercio diplomática sea para el bien de nuestro país.
Autor: Carlos McCoy.
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