El Tribunal Superior Electoral (TSE) parecería que va a tener mucho
trabajo en el 2013 con el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) por
las pugnas entre el ingeniero Miguel Vargas Maldonado y el ex presidente
Hipólito Mejía.
El expediente de citación a Mejía por parte del sector de Vargas
Maldonado, la convocatoria de la Comisión Política y la fecha de la
convención para renovar sus autoridades son algunos de los asuntos que
el TSE deberá pronunciarse.
Recientemente, el TSE calificó de inconstitucional el proceso
instrumentado contra Mejía por el sector de Vargas Maldonado para
supuestamente expulsarlo del PRD junto a los secretarios general, de
organización y el presidente en funciones, licenciado Orlando Jorge
Mera, doctora Geanilda Vásquez y licenciado Andrés Bautista García.
Sin embargo, el sector de Vargas Maldonado dijo que el juicio
disciplinario contra Mejía, seguirá porque se tomarán las medidas
preventivas sugeridas por el TSE.
Uno de los elementos resaltantes del fallo del TSE para favorecer a
Mejía fue que no se le notificó las causas por las cuales sería
procesado internamente.
El fiscal nacional del PRD, doctor Geovanny Tejada, advirtió que el
proceso contra Mejía continúa y que se harán los correctivos sugeridos
por la TSE para “cumplir con todas las de la ley”.
Se informó que en la segunda semana de enero se reiniciaría el
proceso contra Mejía, Jorge Mera, Vásquez y Bautista García por supuesta
violación de los estatutos.
Entre las acusaciones formuladas por el sector de Vargas Maldonado
contra Mejía y los demás están usurpación de poder, indisciplina e
intento de división de la organización.
Siguen imputaciones
El ex presidente Mejía dijo la semana pasada que Vargas Maldonado no
le apoyó en las elecciones de mayo porque se negó a firmar un pacto
para que este se quedará en la presidencia del PRD hasta el 2016.
Vargas declaró que oportunamente responderá esa afirmación de Mejía,
porque no quiere que cualquier juicio que emita entorpezca el proceso
disciplinario contra el ex mandatario.
Previo a esta imputación, Mejía había dicho que no existen
posibilidades de él llegar a un acuerdo con Vargas Maldonado, porque
este “es un traicionero”.
Las declaraciones de Mejía subidas de tono, tienden a radicalizar las posiciones entre los perredeístas.
Un show
Los seguidores de Mejía entienden que el proceso disciplinario busca
distraer la atención de los problemas nacionales en beneficio del
presidente Danilo Medina.
Además, que con esa acción se busca evitar que el PRD acuda a las
elecciones del 2016 para limpiarle el camino al ex presidente Leonel
Fernández que buscaría retornar de nuevo al poder.
Fruto de las constantes fricciones internas dos diputados
abandonaron esa organización: los doctores Christian Paredes y Carlos
Gabriel García.
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